De entre todas las apuestas del Estado en Burgos, la que quizás nos trae más recuerdos de tiempos pasados es La Quiniela. Es como si siempre hubiera estado en nuestras vidas, pero en realidad no tiene tantos años.

Parece que en el año 1929 en Santander, en un bar llamado La Callealtera, bastantes personas acudían y apostaban por partidos que se les ocurrían, hasta llegar a juntarse treinta personas, y resultando premiado el que más se acercase al resultado. Al final de la temporada de fútbol eran ya cien personas, por lo que pensaron en crear un sistema para que aquello no se les fuera de las manos y los apostantes no hiciesen trampas. A partir de 1931 quedó regulado y comenzó a tributar el 10% a hacienda.

La primera jornada de La Quiniela oficial reconocida ya como parte de las apuestas del Estado en Burgos y del resto de España fue el 22 de septiembre de 1946. Eran apuestas de 2 pesetas y se tenía en cuenta solo a 14 equipos, por lo que se apostaba sobre el resultado de siete partidos. Gracias a la recaudación de La Quiniela se pudieron construir lugares emblemáticos como el hospital Gregorio Marañón de Madrid, entre otros.

No solo sirvió para esto, sino que además fue y sigue siendo hoy un motivo de esperanza para todos los españoles que se acercan cada semana al estanco a hacer su apuesta. La Quiniela es de todos y para todos. Todos hemos soñado alguna vez con lo que haríamos si nos tocase una de catorce o el pleno al quince. La Quiniela es un invento muy español y seguirá formando parte de las apuestas.

Nosotros somos parte de esos españoles que seguimos soñando con una de catorce. Y en el Estanco Miguel podremos ayudarte a cumplir tus sueños.